La Asamblea General aprueba la resolución 1111 (XI) que sella la admisión de Marruecos como miembro de las Naciones Unidas. El mismo día es admitida en la ONU por la resolución 1112 (XI) Túnez. Tras su ingreso en la organización, Marruecos plantea «reservas» (reclamaciones) sobre Ceuta, Melilla, Sáhara, Sidi Ifni y, también, la actual Mauritania.